Ecuador frente al reto de la trazabilidad: ¿puede la pesca sostenible abrir más puertas al mundo?

¿Puede Ecuador competir en un mundo con subsidios millonarios?
El nuevo reto para el camarón ecuatoriano
Fernando Navia, especialista en relaciones comerciales internacionales, expuso una de las preocupaciones más urgentes para la industria acuícola ecuatoriana: las crecientes barreras proteccionistas en mercados clave como Brasil, China y Estados Unidos, que amenazan el crecimiento y la estabilidad del sector camaronero.
Navia puso sobre la mesa un ejemplo claro: “Brasil había enviado técnicos que elogiaron los protocolos sanitarios del Ecuador en noviembre. Pero meses después, sin conclusiones definitivas, detienen nuestras exportaciones por supuestas anomalías”. Este tipo de acciones, aunque sin respaldo técnico sólido, generan un impacto económico inmediato en una de las industrias más importantes del país.
Pero Brasil no es el único obstáculo. También mencionó el caso del dumping en Estados Unidos y las restricciones impuestas por China a nueve exportadoras ecuatorianas. “Cuando eres tan grande como Ecuador en camarón, compites contra decisiones políticas y económicas, no solo comerciales”, advirtió.
Subsidios globales y una flota envejecida
Uno de los puntos más críticos que abordó Navia fue la diferencia en condiciones entre Ecuador y potencias como China. Mientras el país asiático destina más de 21.000 millones de dólares solo entre 2024 y 2028 para renovar su flota pesquera, Ecuador tiene barcos con una edad promedio de 40 años y sin un plan de renovación sostenible.
“China ha dado desde 2010 hasta 2019 más de 127.000 millones en créditos blandos y 5.000 millones en subsidios directos a su industria pesquera. ¿Cómo competimos así?”, cuestionó Navia, haciendo un llamado urgente al Estado ecuatoriano a replantear su rol ante las cadenas productivas que nacieron globales, como el camarón, las flores o la pesca.
El rol del Estado: más allá del discurso
Para Navia, el éxito empresarial de los exportadores ecuatorianos no debe ser motivo de crítica ni envidia, sino un punto de partida para generar desarrollo. “No nos debe doler que el empresario camaronero tenga éxito. Su cadena de valor genera empleos y bienestar social. Eso es política pública bien aplicada”, señaló.
La propuesta se centra en una colaboración real entre el sector público y privado, que entienda la magnitud del desafío y actúe en consecuencia. Esto implica desde facilitar el acceso a financiamiento para modernizar la flota, hasta defender activamente los intereses del país en organismos internacionales y frente a socios comerciales.
Competir con inteligencia, no solo con esfuerzo
El llamado de atención de Fernando Navia no debe pasar desapercibida porque Ecuador tiene el talento, la capacidad productiva y el prestigio en sus productos. Pero sin respaldo estratégico, difícilmente podrá mantenerse competitivo ante países que no solo producen, sino que protegen y subsidian a sus industrias con miles de millones.
La sostenibilidad, en este caso, no solo implica cuidar los recursos, sino también construir un entorno institucional que permita que las empresas que lo hacen bien, puedan seguir creciendo y generando progreso para todos.