Ecuador frente al reto de la trazabilidad: ¿puede la pesca sostenible abrir más puertas al mundo?

Puerto López celebra su identidad pesquera con el Festival del Dorado
Más de una década de tradición, arte y sostenibilidad se unen en un evento que impulsa la economía local y promueve la pesca responsable en la costa manabita.
Puerto López, más que un destino turístico, es una comunidad que respira mar. Este cantón costero de Manabí acogió el pasado 1 de febrero la octava edición del Festival Cultural de Pesca del Dorado, una iniciativa que une a pescadores artesanales, autoridades locales, emprendedores y turistas en torno a una especie clave para la economía del país: el dorado (mahi mahi).
El evento, liderado por la alcaldesa Verónica Lucas, se consolida como un símbolo de reactivación económica, orgullo local y fomento del consumo de pescado fresco. “Puerto López no solo es turismo, es pesca, es familia, es esfuerzo. Por eso decimos: mi gente, mis pescadores”, expresó emocionada la alcaldesa durante su intervención en el programa.
El dorado: motor económico y emblema cultural
Con un promedio anual de 100 millones de dólares en exportaciones, principalmente hacia Estados Unidos, el dorado es una de las especies más valiosas capturadas por la pesca artesanal en Ecuador. Se estima que cerca de 10.000 embarcaciones se movilizan en temporada para su pesca, generando empleo directo a unas 30.000 personas, sin contar a quienes participan en la cadena logística, comercial y gastronómica.
Puerto López, junto con Manta, Jaramijó, Esmeraldas, Santa Rosa y Anconcito, forman parte de las caletas clave donde esta pesquería ha crecido sostenidamente durante las últimas tres décadas.
Más que pesca: gastronomía, arte y comunidad
La agenda del festival comenzó desde las 4 de la mañana, con el zarpe de los pescadores para competir por capturar el dorado más grande del día. A lo largo de la jornada, los asistentes disfrutaron de concursos de pintura, presentaciones culturales, ferias de emprendimiento y una exposición gastronómica protagonizada, por supuesto, por el dorado preparado en distintas recetas: ceviches, apanados, casuelas y más.
Los visitantes también pudieron adquirir artesanías y prendas alusivas al dorado, cuyos vivos colores se prestan para inspirar moda, arte y orgullo local.
Una vitrina para el turismo sostenible
Puerto López es mundialmente reconocido por su temporada de avistamiento de ballenas, pero eventos como el Festival del Dorado abren nuevas oportunidades para diversificar la oferta turística. “Este festival fortalece nuestra identidad. No solo atrae a turistas nacionales y extranjeros, también une al cantón: restaurantes, cabañas, hoteles, carperos y, por supuesto, a nuestros pescadores”, destacó Lucas.
Además, la municipalidad ha trabajado junto con la ciudadanía para mantener dos playas certificadas como sostenibles y fortalecer la coordinación con operadores turísticos para garantizar experiencias responsables y ordenadas.
Retos para la pesca artesanal
Pese al ambiente festivo, el festival también puso sobre la mesa preocupaciones del sector pesquero. Según testimonios de los propios pescadores, la temporada actual ha registrado una baja en la presencia del dorado, posiblemente asociada al cambio climático o alteraciones en las corrientes marinas. Estudios regionales buscan determinar el estado real de la población de esta especie clave en aguas compartidas entre Perú, Ecuador, Colombia y otros países.
Mirando al futuro
Durante el programa, se hizo un llamado urgente a las autoridades nacionales y provinciales para culminar la construcción del puerto pesquero artesanal en Puerto López, infraestructura clave para fortalecer esta actividad. “Si no pescan, no venden. Y si no venden, no comen. Esta es la realidad de miles de familias en la costa”, se recalcó en la entrevista.
A su vez, se propuso integrar más al sector turístico con el festival, generando alianzas para que hoteles y operadores ofrezcan paquetes que incluyan esta experiencia única.